El glaucoma es una enfermedad de los ojos, en la que se produce un daño en el nervio óptico, el encargado de llevar las imágenes desde el ojo hasta el cerebro, causando como resultado final, pérdida progresiva de visión. El principal factor de riesgo es el aumento de la presión intraocular. Podemos tratar y controlar con eficacia el glaucoma si seguimos los siguientes consejos:
- Realizar controles periódicos a partir de los 40 años y con más motivo si tenemos familiares que lo padecen.
- Muy importante seguir estrictamente el tratamiento prescrito por el médico.
- Precaución con el resto de medicación que se esté tomando, para que no interfieran.
- Abandonar hábitos tóxicos como el tabaco o el alcohol, que podrían contribuir a dañar el nervio óptico.
- Mantener los ojos limpios y libres de sustancias que provoquen irritación. En el caso de las mujeres tener cuidado con los cosméticos para los ojos.
- No frotarse los ojos.
- Usar gafas de protección, por ejemplo en el caso de practicar natación.
- Comer alimentos saludables, disminuyendo el consumo de sal para evitar la retención de líquidos.
- Llevar una vida relajada, evitando o disminuyendo el estrés.
El glaucoma requiere control, tratamiento, vida saludable y seguimiento para evitar o reducir al mínimo la pérdida de visión.
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